jueves, 16 de abril de 2009


Comienzo a colgar las críticas que hemos realizado a partir del taller.

espero que os gusten.

PINTAR ESTÁ DE MODA

Susy Gómez
El timón de mis almas
CAC Málaga
C/ Alemania, s/n. Hasta el 21 de junio de 2009

De repente parece que todo el mundo quiere pintar de nuevo, incluso artistas que no pintan. Es el caso de esta serie de fotografías con las que Susy Gómez (Pollença, Mallorca, 1964) pretende aportar nuevas reflexiones sobre la relación entre la fotografía y la pintura. Tomando como base una selección de fotos de moda de la revista Vogue España, la artista ha intervenido en ellas con texturas de pintura y otros materiales –purpurina, cera de velas encendidas y objetos familiares- para ampliar fotográficamente el resultado y reproducirlo en gran formato sobre soporte de aluminio. En el texto del catálogo de la exposición se indica que la muestra “gira en torno a la necesidad vital de cuestionarse el presente, el destino, el sentido de la vida y la identidad desde múltiples ámbitos” y que estamos ante “imágenes de gran belleza con un cierto halo de misterio”. Más que de misterio, este crítico prefiere hablar de perplejidad, la que uno experimenta ante semejante espectáculo de retórica vacua y ombliguista. No hay verdadero discurso sobre la relación entre fotografía y pintura, ni tampoco sobre la moda, ni mucho menos sobre “el cuerpo y la identidad”, como también se nos indica en el catálogo. Ni siquiera como manifestación tardía de arte pop la muestra aporta gran cosa, más allá de un inmenso vacío esteticista que pretende rellenarse en última instancia con referencias a la memoria familiar, caso del anillo y el pendiente de la madre del artista que aparecen en un par de fotografías. El detalle final de apoyar las obras directamente en el suelo pretende, según la artista, tratarlas como si fuesen esculturas. En realidad ese gesto, sumado al soporte lujoso de aluminio, aporta una suerte de monumentalidad pija que termina siendo lo más revelador del conjunto. Desalentado por las foto-pinturas, este crítico debe confesar que se saltó a la torera la videoperformance A Licinia Gómez (2009), con la que Susy Gómez completa su muestra.

ESTÉTICA “POPPY”. Decía Fernando Castro en el taller “La Conspiración de la Plaza Dealy” que “el arte contemporáneo no es tan complicado de entender como la gente piensa a menudo”. A veces ni siquiera hay gran cosa que entender. Lo que como ocurrencia puntual resulta simpática, se convierte repetida en esta serie de 18 piezas en una celebración de la banalidad por la banalidad, el enésimo signo de los tiempos. En realidad la muestra es perfectamente coherente con la trayectoria de Susy Gómez, artista situable en cierta escena barcelonesa de la última década –la artista estudió Bellas Artes en la Ciudad Condal- donde lo que prima ante todo es el solipsismo más pueril. Al final las asociaciones mentales se imponen, y ante esta estética pop de la tontería uno termina acordándose más de las ilustraciones de Jordi Labanda y del criado que trae a los invitados los Ferrero Rocher que del legado de Andy Warhol. No dudamos igualmente que la revista Vogue España, tal como ha anunciado en nota de prensa, dará en sus páginas una cobertura especial a la exposición de Susy Gómez, además de regalar con el número del mes “obras de la artista vinculadas a la muestra”. Al final sí que hay una reflexión sobre la moda y la sociedad del espectáculo, aunque quizás no sea la que la artista estaba buscando.

Juan Carlos

2 comentarios:

  1. Pues tenía una visita reservada para visitar esas exposiciones con un grupo de estudiantes de dibujo,pero me entran ganas de cancelarla, no está la cosa como para perder el tiempo y menos para deseducar..., más aún.Esclarecedores comentarios!.

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  2. La firma completa de la reseña es Juan Carlos Pérez. Perdón por no poner el apellido, culpa mía. No había intención de ocultarlo.

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